Este pasado miércoles se vivió un nuevo capítulo del late «Sigamos de largo», donde la comediante Chiqui Aguayo fue la invitada, que habló de cómo lleva ser mamá por primera vez y cómo ha cambiado su perspectiva en otras áreas de su vida.
De las transformaciones que ha vivido, Chiqui reconoce que un cambio inesperado tras el nacimiento de su hija Amal fue en su estilo de hacer comedia.
La panelista de «Buenos días a todos» explicó que: «Si la Amal hubiera sido hombre, no sé si hubiera pasado, pero como es mujer, hay chistes que no quiero volver a contar, hay cosas de las que no me quiero reír».
Es por esto que su rutina se ha visto alterada. «Sacaría todos los chistes donde yo me trato de fea, porque encuentro que para la Amal voy a ser hermosa. No quiero seguir con ese bullying que me hago siempre«, explicó.
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En esa línea, Chiqui indicó que piensa dejar de hacer chistes respecto a los prototipos de belleza. «No quiero perpetuar que todas tengamos que ser flacas raquíticas ni encajar en los moldes. Le he dado hartas vueltas a los chistes», concluyó.