Ya nadie puede vivir sin su smartphone ni salir de la casa sin él, pero de lo que nunca te habías dado cuenta es que este podría estar haciéndole un severo daño a la piel de tu rostro.
Incluso, el año pasado un grupo de dermatólogos participaron en una conferencia donde advirtieron que la luz visible de alta energía, podía conducir al envejecimiento prematuro del rostro. Sin embargo, este no es el único daño que tu celular puede causarle a tu rostro, acá te contaremos de otros.
Daños
- Aparición de arrugas: Ver hacia abajo tu celular durante períodos de tiempo puede causarte lo que se llama el síndrome de tech-neck. Este, hace referencia a las arrugas que aparecen debajo de la barbilla y al rededor del cuello. Además, entrecerrar los ojos para ver textos pequeños puede producirte arrugas “patas de gallo”.
- Dermatitis: La próxima vez que tengas una erupción en tu piel, piensa que tu celular puede ser el causante. La ciencia indica que el níquel y el cromo en las carcazas de los teléfonos son capaces de causar reacción alérgica de contacto.
- Cambios en el tono de la piel: Luego que tu celular se calienta cuando lo utilizas mucho tiempo, al tenerlo pegado ato rostro, la exposición de calor puede aumentar la producción de melanina, lo que podría provocar que el tono general del rostro sea desigual y aparezcan manchas oscuras.
- Acné: Por las bacterias y gérmenes que tiene tu celular, que son más de las que tu crees, podrían entrar en contacto con tu piel frecuentemente. Eso puede ocasionar que, en menor o mayor grado, aparezcan brotes de acné en tu rostro.
- Ojeras: El resplandor de luz que emana de las pantallas de los celulares puede romper tu ciclo del sueño y significa que es más difícil conciliar el sueño. Con el paso del tiempo, esto podría producir ojeras marcadas.