Si tu objetivo es comenzar el año con energías renovadas y libre de toxinas, aquí te contamos cómo desintoxicar y darle un respiro a tu cuerpo, que de seguro te lo agradecerá.
- Toma un vaso de agua tibia con limón en ayuna: Es excelente para limpiar el organismo, estimular el hígado y limpiar la vesícula biliar. Puedes incluirlo como parte de tu rutina o realizarlo como una cura de una o dos semanas.
- Respira mejor: Respirar a conciencia y desde el vientre es una excelente forma de eliminar toxinas. Ello, pues se estimula el sistema inmunológico y libera estrés.
- Ten un ciclo de sueño regular: Dormir y despertarse a horas fijas es una forma en la que el cuerpo se educa para descansar y reponerse del trajín diario. Por el contrario, un desorden de sueño puede resultar en más estrés y falta de eliminación correcta de toxinas.
- Dale prioridad a los alimentos de temporada: El ideal es consumir frutas y verduras orgánicas, pues no han sido expuestas al mismo tipo de pesticidas ni a la modificación genética que otro tipo de productos. Si esto se te dificulta, al menos intenta que sean alimentos de temporada.
- Reduce los alimentos altamente procesados: Es decir, trata de evitar embutidos, alimentos empacados, snacks y frituras, entre otros.
- Menos alcohol y tabaco: Realmente no hace falta explicación. Procura que ni el alcohol ni el tabaco sean parte de tu vida cotidiana.
- Tómate el tiempo de masticar: Es lo más importante para una buena digestión y una absorción eficiente de los alimentos.
- Abre las ventanas: Los espacios están vivos y por eso tienes que airearlos todos los días para evitar que sea el mismo aire el que esté circulando permanentemente. Asimismo, para erradicar la acumulación de productos químicos en el ambiente.
- ¡Muévete!: Si el deporte no es lo tuyo, asegúrate entonces de moverte en cada oportunidad que tengas. Usa la bicicleta para desplazarte, camina en vez de usar el auto y utiliza las escaleras en vez del ascensor. Cada paso y cada pulsación cuenta.
- Preocúpate menos: La ansiedad y el estrés secretan hormonas negativas para el cuerpo. De hecho, no es casualidad que tras periodos de angustia nos bajen las defensas y nos enfermemos. Recuerda que el cuerpo somatiza todo, así que no te enfermes por cosas que se salen de tu alcance y prioriza siempre tu bienestar interior.