El muérdago es una planta que está llena de simbolismos, y existen multitud de leyendas y misterios en torno a ella.
¿De dónde viene la tradición de revivirla cada Navidad?
Símbolo de amor
Es un mito escandinavo que se remonta al siglo XVII. El muérdago era sagrado para los druidas y lo consideraban mágico, porque permanecía verde todo el año.
De hecho, los escandinavos creían que era una planta que otorgaba la paz, ya que bajo ella los combatientes podían declarar una tregua en la batalla.
Pero la tradición tomó un significado más romántico a partir del XVIII, el cual se fue expandiendo por toda Europa.
Según las creencias de aquella época, besarse bajo un muérdago significaba el comienzo de un apasionado romance.
Y no solo eso, ya que más tarde se convirtió en un rito a la hora de pedir matrimonio.
Pero, ¿qué tiene que ver el muérdago con la Navidad?
La leyenda de esta planta como símbolo del amor fue mutando con los años.
Y la creencia que tomó más fuerza, es que las parejas que se besaban bajo un muérdago, en la Nochebuena, serían fértiles y exitosas.
Debajo de un muérdago, ya que éste no podía ser cortado, ni tocar el suelo, pues entonces perdía sus propiedades afrodisíacas.
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Pero también se pensaba que el muérdago tenía propiedades mágicas, y protegía a los hogares de las tormentas y el fuego.
De ahí que se colgara en los umbrales de las puertas; algo que sigue haciendo en la actualidad para ahuyentar a los malos espíritus.
Decoración navideña
La decoración con elementos vegetales son típicos de esta época festiva.
Desde pinos, centros de mesa con piñas, ramas de acebo y flores de pascua, hasta el famoso e inconfundible muérdago.
De hecho, es una de las plantas protagonistas de la Navidad y es perfecto para decorar diferentes espacios, como el salón o la puerta de entrada.
Y asimismo, es una buena opción para regalar, ya que es una especie que perdurará viva durante muchos meses.
Según la creencia, el muérdago de Navidad debe regalarse a otra persona y esa otra persona a ti, ya que el intercambio fomentará la buena suerte entre los dos.
¡Ojo! Se recomienda no comer las bayas del muérdago, ya que contienen la sustancia viscotoxina, que puede ser perjudicial para la salud.