El pasado 19 de abril la mayoría de los hogares de nuestro país fue partícipe de una nueva versión del Censo, que tras el fracaso del mejor Censo de la historia en 2012, llegaba este 2017 en un formato abreviado.
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Además, este año el Censo comenzó un día antes, específicamente en la noche del 18 de abril, con el registro de las personas en situación de calle en las carreteras urbanas y las estaciones de Metro de Santiago.
Ya en el proceso que todos conocemos, luego de que la voluntaria o voluntario realizara la encuesta, la vivienda quedaba identificada con un sello en sus puertas, en el que se indicaba que ese recinto ya había sido censado.
Pues bien, según indica «La Tercera», desde el Instituto Nacional de Estadística (INE) aclararon que el sello debe permanecer al menos 2 meses pegado en el lugar donde lo dejó el voluntario, para así indicar que la vivienda fue censada.
Pero, ¿qué pasa si saco el sello de mi puerta? Nada. Desde el INE informaron al mismo medio que no existe alguna multa o pena asociada. «En el proceso del Censo los únicos multados fueron quienes se negaron a ser censados», explicaron.
Fotos: Agencia Uno
