Todos somos copuchentos y alguna vez hemos escuchado en un lugar público, una conversación que nos llama la atención, desde otra mesa. Y a veces, nos llevamos sorpresas…
La bloguera canadiense Anne Thériault estaba en una cafetería de Toronto, cuando escuchó una conversación tan extraña en la mesa de al lado que sintió la necesidad de tuitearla en vivo y en directo.
Utilizando su celular, esta bloguera fue contando el «minuto a minuto» de la cita, que duró 30 minutos. En toda la conversación, la copuchenta sintió que el hombre no le ponía atención a su cita. ¿Un par de perlitas, de este pastel? «Mis amigos creen que me parezco a James Franco» y «mi salsa puttanesca es mejor que la de este chef».
Obviamente, la pobre mujer que estaba en la cita tenía una cara de pánico contenido y tuvo que inventarse una buena excusa para huir de la que posiblemente sea la media hora más aburrida de su vida.
¿Tienes una historia de terror para contarnos de una primera cita?