Castings en su departamento, abuso de poder y acoso sexual. Esas son algunas de las acusaciones que hacen siete mujeres a la revista «El Sábado» sobre el director nacional Herval Abreu.
Abreu dirigió producciones de Canal 13 como «Machos» y «Soltera otra vez», antes estuvo en Mega y ahí dirigió «Rosabella».
Una de las mujeres que lo acusa es la guionista Bárbara Zemelman. Ella narró, entre otras cosas, que en 2016, durante la primera etapa de la teleserie «Preciosas», ella recibió un mensaje de WhatsApp de Abreu que decía ‘quiero hacerte el amor ahora’. A pesar de que después le envío risas, luego le mandó más mensajes diciendo que estaba «enamorado» de su cerebro.
Otra de las mujeres que es parte del reportaje es Carola Paz, ex diseñadora y arquitecta que durante 21 años no dijo nada sobre lo que le hizo Abreu. Sin embargo, ahora confesó que un día, «él me levantó el vestido. Metió la mano por debajo de mi vestido. Yo creo que el estaba intentando ver, dentro de toda su locura, si yo estaba excitada. Cuando me tocó me sentí congelada, porque no sabía qué hacer. No le quité la mano. Me debo haber acomodado para alejarme de su mano, pero no lo golpeé ni le dije nada. Me quedé muda y no le dije nada el resto de la noche. Sentía que iba en un túnel que cada vez estaba más oscuro. Hasta hoy me da asco acordarme», cuenta Paz.
Carola también contó que para Rosabella, Abreu la obligó a desfilar en ropa interior en su oficina y la atacaba constantemente por su cuerpo. Le decía que estaba gorda.
La defensa de Abreu
Herval Abreu se refirió a las acusaciones en su contra y las niega tajantemente.
El director dijo que «el daño que se me ha hecho es gigante, acabo de perder hacer un musical, que era el sueño de toda mi vida, acabo de quedar afuera”.
Además dijo que las acusaciones son «ficción» y que «un pecado de mi vida es dedicarle más tiempo del que debo a mi pega y más pasión de la que debo. Trabajar con gente más allá y poder conseguir algo más de una actriz, eso es algo que me apasiona (…) Nunca le he dado una mala mirada, porque no ha tenido una mala intención«.