No porque sea invierno hay que descuidar las uñas. Por eso, si quieres mantenerlas sanas y devolverles su tono blanco natural sin necesidad de recurrir a tratamientos complicados, puedes hacerlo siguiendo este sencillo truco casero con agua oxigenada.
Debido a sus propiedades blanqueadoras, antisépticas y a las sustancias desinfectantes presentes en su composición, el agua oxigenada te dejará las uñas blancas y sin manchas, a la vez que acabará con los gérmenes, bacterias y hongos que puedan encontrarse en ellas.
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Para llevar a cabo este tratamiento, debes verter una cucharada de agua oxigenada en medio vaso de agua que esté tibia. Luego, remoja las uñas en el líquido durante unos 10 a 15 minutos, enjuaga con agua tibia y sécalas. Tan simple como eso.
Si repites esta operación a diario, notarás resultados efectivos en muy poco tiempo. Eso sí, cabe destacar que el agua oxigenada no solamente sirve para blanquear las uñas de las manos y pies, pues también es un perfecto aclarante para el cabello, las cejas, los dientes y las axilas.