¡El calor que hemos sentido en los últimos días es una clara señal de que el verano está cada vez más cerca! Y si tu misión es lograr un cuerpo en forma y sentirte bien por dentro y por fuera para los meses estivales, sigue estos sencillos consejos para mantenerte saludable.
1. Bebe uno o dos vaso de agua antes de las comidas
Te llenará el estómago y logrará que te sientas saciada antes. Lo mismo sucede con los refrescos carbonatados: el gas hará de las suyas para disminuir la sensación de hambre.
2. Come cada tres horas y media
Si quieres mantener el apetito a raya, convierte a tu estómago en un reloj suizo. Creándote un horario de comidas que no supere las tres horas de diferencia, así evitarás ataques de ansiedad que deriven en que termines asaltando la máquina de golosinas. También conseguirás que tu cuerpo no almacene la energía de tu siguiente comida en lugar de quemarla, reacción habitual cuando las ingestas están excesivamente distanciadas.
3. Relájate de fines de semana…
El próximo viernes por la tarde, instaura la celebración de Los días trampa. Tienes sábado y domingo para desayunar algunos dulces, almorzar pasta y terminar con ese antojo de helado. Tampoco se trata de inducirte un coma diabético, pero con la llegada del fin de semana puedes liberarte de las cadenas del brócoli y darle rienda suelta a tus antojos más oscuros.
4. Para los marchitos martes y los mustios miércoles
Puedes consolarte con un helado casero con base de plátano. Escoge el más maduro del racimo, córtalo y mételo en el congelador. Al día siguiente, pásalo por la batidora junto con tu fruta preferida. También puedes optar por añadirle cacao en polvo sin azúcar o esencia de vainilla. Un toque de leche aumentará su cremosidad y consiguiente sensación de helado.
5. La ensalada, sólo con vinagre
Obviando el sabor que aportan, los aliños preparados y el aceite se emplean para lubricar las hojas de la lechuga. Abandonarlos supone disminuir el aporte energético en unas 150 calorías. Si, en un esfuerzo, te centras en lo práctico, verás que el vinagre cumple la primera función por la mitad de calorías. El de manzana es el más ligero de todos.
6. Y la fruta, para merendar
Para lograr establecer la fruta como merienda, haz del café con un par de gramos de chocolate tu postre. Si logras oír a cada célula de tu cuerpo clamar por una ración de hidratos de carbono, toma un puñado de frutos secos tostados o concédete una galleta que no supere las 100 calorías.
7. Gritan mucho, esas células
Escúchalas cuando hayas hecho deporte. Si no es fin de semana y has sudado la camiseta, combina los hidratos sólo con verduras. Esta es una de las claves para alcanzar la paz nutricional: proteínas e hidratos sólo se mezclan en los días trampa.
8. Camina
Es la solución para quienes odien el gimnasio. Aprovecha de escuchar música o sal con tu pareja a caminar, después de un par de cuadras te sentirás mucho mejor.
Fuente: Cosmopolitan.es