Los tiempos cambian y las relaciones de pareja también. Por lo mismo, últimamente los pololeos a distancia no parecen tan imposibles como antes. Principalmente por las herramientas que nos entregan las nuevas tecnologías.
Los motivos para irte a vivir a otra ciudad pueden ser muchos: trabajo, estudios o simplemente por cumplir el sueño de viajar por el mundo, entre otros. Pero, ¿qué hacer para sobrellevar esta situación si estás en pareja?
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Es un hecho que cuando uno de los dos se aleja por miles de kilómetros, la relación se pone a prueba, pues mantener un amor a distancia no es para nada fácil, sin embargo, no imposible.
En estos casos, el futuro de la relación va a depender en gran parte de cómo se establece la relación a distancia y cuál es la participación que los integrantes de la pareja tienen. En esa línea, los expertos señalan que si ambos estuvieron de acuerdo en que uno de los dos se fuera lejos, y fue una decisión conversada, es más factible que perdure en el tiempo.
De hecho, un estudio elaborado por la investigadora Crystal Jiang de la Universidad de Hong Kong y por el profesor Jeffrey Hancock de la Universidad Cornell de Estados Unidos, las relaciones a distancia pueden aun ser más exitosas que las convencionales, ya que las personas que tienen relaciones a distancia suelen crear lazos más fuertes que las parejas normales gracias a que su comunicación es más constante y profunda.
Además, las nuevas tecnologías y el bajo costo de las tarifas de viajes también permite que estén más cerca. Aún así, aquí te dejamos 7 tips para ayudarte a continuar con un amor a distancia de forma saludable:
Cultivar los mundos propios
La relación de pareja, es sólo una de las dimensiones que tiene cada personal. De ahí viene la importancia de cultivar los mundos propios, porque en la medida que trabajas contigo mismo, te conviertes en mejor pareja y el otro no pasa a ser ni dueño ni responsable de tí.
Establecer medios de contacto
Se recomienda que establezcan ciertos acuerdos básicos, pero que no sean tan rígidos. Es decir, si acordaron hablar lunes, miércoles, viernes y domingo, igual la persona pueda llamar a su pareja un martes, por ejemplo. Se deben comunicar con una frecuencia que cada pareja estime necesario. Muchas veces, más que todos los días, tiene que ver con la profundidad, con la calidad de la comunicación.
Vivir la sexualidad de una forma diferente
Es importante asumir que la sexualidad también tiene que ver con el hecho de sentirse sensual, bonito, atractivo y no solo tiene que ver con la relación sexual. Todo esto nos sirve para mantener la chispa viva, a pesar de que la otra persona no esté con nosotros presente físicamente.
Trabajar la confianza en el otro
Cuando uno tiene fantasías de que el otro te va a engañar, no es sólo una desconfianza en el otro, sino antes que todo, una desconfianza de uno mismo. Es un trabajo de desarrollo personal que tiene que ver con descubrir cuáles son las razones personales que hacen sentir esas sensaciones y cuáles son los mensajes que el otro me envía que aumentan la desconfianza.
Hacer planes a futuro juntos
Una relación de pareja tensionada por la distancia, puede encontrar alivio en la posibilidad de tener encuentros físicos. Planear da tranquilidad, sobre todo cuando la planificación viene de ambas partes. No es recomendable el “mi amor, te voy a ir a ver, ya compré el pasaje tal día”, sino que tiene que ver con proyectarse y comprometerse los dos con el plan.
Tener un objetivo claro de pareja
Lo que define una relación de pareja son las proyecciones. Mantener el compromiso con el proyecto en común transmite fuerza, ya que a pesar de que están separados la pareja se mantiene.
Evitar sacar celos al otro
Los celos son una manifestación de las inseguridades que provoca la separación. Para que una relación a distancia funcione, lo importante es ser lo más honestos posible. La persona que saca celos, es porque está insegura.
Las personas que tengan menor conocimiento de sí mismas, mayor nivel de inseguridad y menor tolerancia a la frustración, van a estar presionando a su pareja constantemente, lo que provoca daño a la relación.