El uso regular y un mal cuidado van deteriorando los zapatos poco a poco. Por lo tanto, si quieres que perduren el mayor tiempo posible, aprende a mantenerlos con estos prácticos tips.
- Límpialos oportunamente: Una vez a la semana, al menos, es necesario pasar delicadamente un paño húmedo en la superficie del zapato, para que no pierda su color original ni tampoco su brillo. Eso sí, debes tomar en cuenta el material. Si es gamuza, se recomienda usar soda; mientras que si es de cuero, lo ideal es lustrarlo.
- Guárdalos en el lugar indicado: Amontonar los zapatos en una esquina del armario puede dañar la tela o la forma del zapato. Por eso, mejor acomódalos en una repisa o zapatera para que tengan su propio espacio y rellénalos con una media o papel crepé para mantener la forma original.
- Evita la humedad: Para esto es necesario conservar los zapatos en un espacio abierto. Ahora, si no tienes otra opción que guardados en alguna caja o lugar cerrado, usa bolsitas de gel de silice y límpialos del polvo a menudo. Además, recuerda que exponer tus zapatos a la humedad puede dañar la tela y expeler mal olor.
- Hazles mantenimiento: No esperes al último momento para repararlos si tienen algún desperfecto. Si sientes que el tacón está flojo o la suela se está separando, es importante que lleves tu calzado a un zapatero de inmediato. Si dejas pasar mucho tiempo, quizá luego queden inutilizables. En todo caso, si es necesario cambiar el taco o la suela entera, invierte en ello y no te arrepentirás.
- Sécalos adecuadamente: Sí los has mojado, lo cual es muy posible en estos días de mal tiempo, debes dejarlos secar por lo menos durante un día y echarles un poco de crema para que recuperen su vida y brillo. Además, toma la precaución de colocarlos de lado y nunca utilices un secador de pelo, pues se deterioran.