Los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) son claros: el 75% de la población mundial consume el doble de la cantidad de sal considerada saludable, incluyendo Latinoamérica. Según la entidad, la ingesta diaria no debe ser superior a los 5 gramos que es el equivalente a una cucharadita de café, en el caso de los adultos.
En niños de 7 a 10 años, el consumo no puede exceder los 4 gramos al día; mientras que los menores de 7 no deben sobrepasar los 3 gramos de sal.
De lo contrario, un consumo superior a esas medidas podría aumentar las posibilidades de sufrir tensión arterial alta, un factor de riesgo para las enfermedades cardiovasculares.
Al respecto, la OMS, en conjunto con la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA), se han planteado reducir la ingesta de sodio de la población en un 30%. Y a propósito de lo mismo, la FDA elaboró una lista para alertar sobre aquellos alimentos que contienen altas cantidades de sodio, generalmente insospechadas.
- Queso procesado: Una lonja de queso para sándwich contiene unos 900 miligramos de sal. Es decir, con tres lonjas de este producto ingerirás más de la mitad de la cantidad diaria recomendada por la OMS. El contenido de sal de otro tipo de quesos, como el cottage, es algo inferior. Pero aun así, una ración de ese queso alcanzaría el 40% de la cantidad diaria aconsejada
- Alimentos congelados: Las bandejas de comida preparada y congelada son una alternativa súper práctica en estos días, pero bastante salada. Según la FDA, algunas variedades contienen hasta 4 gramos de sal, o sea, casi el total recomendado para todo el día.
- Cereales de desayuno: Los expertos tienen a los cereales en el punto de mira por doble motivo; su contenido de azúcar y su contenido de sal. Pero como en general son dulces, ese sabor suele disfrazar al sodio que contienen en exceso, según las autoridades de salud. De hecho, un paquete de cereales de 275 gramos suele tener como media unos 4 gramos de sal.
- Salsas preparadas: Según la FDA, una cucharada de salsa de tomate italiana tiene 243 miligramos de sal y una vinagreta para ensalada hasta 280 miligramos. Una cucharada de kétchup, en tanto, contiene 167 miligramos de sal. La recomendación, entonces, es usar todas esas salsas con moderación.
- Enlatados: La sal es un conservante, por lo que no es de extrañar encontrarla en los enlatados en cantidades más o menos elevadas. De tal forma, la mitad de una lata de porotos verdes posee unos 290 miligramos de sal; mientras que una de sopa de pollo, hasta 1,5 gramos. Por lo tanto, según la FDA, gran parte del exceso de sal que se consume no proviene de lo que se añade al cocinar o en la mesa, sino que de las comidas procesadas o condimentos como la salsa de soja y las pastillas de caldo.