Además de ser económicas y fáciles de preparar, algunas infusiones de hierba poseen propiedades que combaten los problemas de la digestión, aliviando molestias como ardor de estómago, náuseas, flatulencias, espasmos gástricos, inflamaciones o digestiones lentas, entre otras.
Por lo tanto, si eres de las personas que sufre con estos males, no dejes de probar las siguientes infusiones que te ayudarán:
- Manzanilla: Tiene propiedades anti inflamatorias y antiespasmódicas que contribuyen a expulsar los gases, calmar el dolor de estómago y desinflamarlo. También es un excelente antidiarreico.
- Boldo: Ayuda a mejorar la función hepática, la salud de la vesícula biliar, depura el organismo, contribuye a eliminar líquidos y disminuye la sensación de pesadez.
- Menta: Es carminativa y antiespasmódica. Favorece las digestiones lentas, así como puede eliminar los parásitos intestinales y las flatulencias. Además, tiene la capacidad de neutralizar la acidez, es analgésica y posee funciones relajantes sobre la mucosa intestinal. También es muy beneficiosa para cólicos abdominales.
- Jengibre: Es excelente para todo tipo de trastornos gástricos incluidos diarrea, dolores, cólicos y espasmos. Estimula la circulación y la digestión. Es ideal si tienes los intestinos inflamados y evita los gases.
¿Cómo preparar y tomar las infusiones?
- Agrega en una taza cuatro o cinco hojas de la hierba que vayas a preparar o un “saquito” de té.
- Calienta el agua sin dejarla hervir.
- Sírvela en la taza y déjala tapada durante 5 minutos. Puedes colarla si es necesario.
- Evita el agregado de azúcar, pues las infusiones de hierbas se toman al natural.
- De hecho, cuanto más natural sean las hierbas que utilices, mejor serán sus efectos.
- Lo recomendable es tomarlas después de comer o cuando aparezcan las molestias.