Es un alimento que enriquece la dieta, el sabor de las comidas y la salud de quien lo consume. Numerosos estudios destacan sus propiedades. El aceite de oliva es un gran anti inflamatorio, antioxidante y aporta los saludables ácidos grasos Omega3 (que benefician la concentración).
- La calidad virgen extra cuenta con niveles más altos de antioxidantes, como la vitamina E, ayudando a la prevención de varias enfermedades.
- Mejora la circulación del flujo sanguíneo.
- Disminuye la glucemia.
- Ayuda a reducir el colesterol “malo” y aumenta el “bueno” protegiendo las arterias del cuerpo.
- Ayuda a la adecuada absorción de calcio y minerales, como fósforo, magnesio y zinc, creando un efecto protector y tónico sobre el cabello y uñas.
- El consumo habitual de aceite de oliva virgen extra, ayuda a atenuar los problemas de osteoporosis.
- En la piel aporta elasticidad cutánea e hidratación.
- Mejora la función del aparato digestivo, ya que actúa como barrera frente al exceso de ácidos en el estómago.
- El aceite de oliva virgen extra ayuda a asimilar las vitaminas A, D, y K, con más facilidad.
- Ayuda al organismo a ralentizar el envejecimiento, mejora las funciones intestinales y el funcionamiento del hígado.