La carrera por la Casa Blanca no ha dejado indiferente a nadie. Tanto así que ni siquiera la música ha quedado invicta de sufrir consecuencias. De hecho, unos de los últimos afectados por el futuro político del país americano fueron Maná y Nicky Jam.
Todo se originó cuando, el pasado viernes 13 de septiembre, el famoso reguetonero puertorriqueño apareció como invitado en el mitin de campaña de Donald Trump para apoyar su segunda candidatura como presidente de Estados Unidos, a pesar de que este último lo confundiera con una mujer anteriormente.
«Es un honor conocerlo, señor presidente (…) Lo necesitamos de vuelta, ¿verdad? Necesitamos que sea el presidente», señaló Nicky Jam en el escenario frente a los seguidores del magnate, mientras llevaba el gorro rojo característico de «Make America Great Again».
La reacción de Maná
El polémico hecho no dejó indiferente a ninguno de sus seguidores latinos alrededor del mundo. Ni siquiera la banda de pop/rock, Maná, se reservó sus comentarios a través de redes sociales. En un par de horas, el cuarteto mexicano publicó una polémica imagen en la que se lee «Maná no trabaja con racistas».
«Durante los últimos 30 años Maná ha apoyado y defendido los derechos de los latinos en el mundo. No existe negocio o promoción que valga más que la dignidad de nuestra gente», comenzaron explicando en el post los intérpretes de «Labios compartidos».
«Por eso, hoy Maná decidió bajar su colaboración con Nicky Jam de ‘Pies a Cabeza’ de todas las plataformas digitales», concluyeron en el escrito. Recordemos que el remix de su destacado single de 1993 salió a la luz durante el 2014 con el puertorriqueño.
Además, Maná se ha destacado a lo largo de su carrera por tener un fuerte compromiso político con diversas causas. De hecho, en 1996 crearon la Fundación Selva Negra, dedicada a financiar y apoyar proyectos de protección al medio ambiente.