¿Sabías que cada cierto tiempo debes limpiar las brochas y esponjas de maquillaje? Si no haces esto, el producto se irá acumulando junto con los residuos de tu piel, como sus aceites y partículas. De esta manera, cada vez que te maquillajes estarás llevando esos gérmes de ida y vuelta a tu rostro. ¡Terrible! Puedes terminar con infecciones en la dermis, poros tapados e incluso orzuelos.
Para que puedas tener una rutina de belleza e higiene al máximo, acá te contamos cómo puedes limpiar correctamente tus implementos. No solo notarás la diferencia en tu piel, sino también en el resultado final de tu make up. Recuerda que la belleza es salud.
Limpieza de brochas y pinceles
Si usas productos líquidos o en crema, debes lavarlas una vez a la semana. Si usas maquillaje en polvo, lo ideal es que laves tus utensilios al menos una vez al mes. Ojo, que si usas brochas y pinceles de fibras naturales estas son aún más delicadas que las sintéticas.
Para lavarlos te recomendamos usar una fuente plástica o de vidrio, añadirle gotas de jabón suave y llenarla de agua tibia. Si tienes un limpiador especializado, mejor. Usa esta mezcla para remojar un par de segundos tus brochas y pinceles y luego frota sus cerdas suavemente contra la palma de tu mano. Repite esto hasta que la mezcla ya no arrastre más colores. Luego, enjuaga con harta agua.
Para secarlas lo mejor es ponerlas boca abajo, para que el agua no se acumule. Puedes poner una toalla abajo y acostar el pincel sobre algún objeto que lo incline.
Cómo dejar impecable las esponjas
Las esponjitas o beauty blenders debiesen lavarse después de cada uso. Similar a las brochas y pinceles, humedécelas en la misma mezcla de agua y jabón suave y frótalas contra tu mano. Luego de retirar el jabón con harta agua puedes dejarlas secando sobre una toalla.
Ya sabes, ¡partiste a limpiar tus brochas y tus esponjas de maquillaje!