Javiera Acevedo se abrió a conversar sobre cómo ha manejado la maternidad tras haberse separado y la importancia que su hijo tiene en la relación con su expareja.
La actriz fue invitada al podcast «Más que titulares» para conversar íntimamente con Javiera Quiroga, donde reflexionó sobre lo que significa para ella el ser considerada madre soltera.
Recordemos que la modelo se convirtió en madre de su hijo Kai con Federico Mekis en el año 2021, cuando ambos se encontraban enfrentando la separación.
«Los dos hemos sido súper generosos como padres. Queremos lo mejor para nuestro hijo. Es una visión súper madura, que nunca me lo hubiese imaginado y se fue dando de a poco», señaló Javiera Acevedo.
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La profunda reflexión de Javiera Acevedo
Javiera Acevedo se convirtió en madre a la edad de 36 de su hijo Kai, quien actualmente tiene tres años.
Desde entonces, la actriz ha compartido con sus seguidores cómo ha sido el proceso de ser madre. Esto, sin tener en una relación amorosa con el padre de su hijo.
«Lo veo a él como un buen padre, porque eso es lo que yo quiero y lo que mi hijo merece. El camino no ha sido nada fácil. Al final es como ‘avancemos’, porque es la única manera», comentó la modelo al podcast.
En la conversación, además destacó la importancia de poner a los hijos en el centro y no preocuparse de ellos mismos.
«Él es el importante, al final nosotros lo tuvimos a él. El ego mata, nos destruye. Las relaciones personales van a ir mejorando si uno piensa en él. Su felicidad es lo único que importa”, expresó la actriz.
Javiera Acevedo también se refirió a las veces en que ha sido encasillada bajo el nombre de «madre soltera» y su posición frente a esto.
«Tíldenme como quieran. Soy madre soltera porque no estoy con el padre de mi guagua, pero eso fue un punto en un camino demasiado grande, yo soy madre finalmente, porque madre hay una sola”, dijo en la conversación.
Luego cerró diciendo: «Es difícil, porque no tienes una red de apoyo como quisieras, pero lo termino agradeciendo porque quizás la relación con su padre no sería tan buena si yo no hubiese sido madre soltera».