El pasado 04 de septiembre Canal 13 lanzó el spot oficial de su nuevo reality «Palabra de honor, ¿Lealtad o traición?» junto a la participación de Sergio Lagos y Karla Constant.
De acuerdo a lo que expresó el canal, su nueva apuesta televisiva consistirá en un reformatorio militar donde varios reclutados «rebeldes» e «incorregibles» tendrán que disciplinarse.
El registro del spot, grabado en Universidad de Santiago de Chile, refleja esta premisa, mostrando a los animadores caminando entre un grupo de personas con ropa militar que están marchando en formación.
Esto generó controversia e indignación tanto entre los estudiantes, que reconocieron el recinto en redes sociales, como en la rectoría de la universidad.
Tras lo ocurrido, desde rectoría de la USACH enviaron una declaración a los miembros de la comunicad estudiantil, para condenar el uso del recinto para grabar el spot publicitario.
“Queremos ser claros en que nos provoca un profundo dolor la imagen de militares al interior de nuestro campus, aún cuando sea una representación, ya que ataca profundamente nuestra memoria institucional. Somos la universidad más afectada por la dictadura, humana y materialmente, por lo que compartimos el sentir de toda nuestra comunidad«, señalaron en la declaración firmada por seis autoridades de la casa de estudio.
Al mismo tiempo, aclaran que el arriendo del campus fue gestionado por la Corporación Cultural de la universidad, lo que desató el dolor de la comunidad.
Además, tomaron la drástica decisión que solicitarle la renuncia inmediata a la directora ejecutiva de la Corporación Cultural.
En el mismo comunicado, adelantaron que no se volverá a utilizar la USACH para este tipo de arriendos, en respeto a la historia de la institución.
“Hemos determinado eliminar la posibilidad de futuros usos del campus para realizar spots publicitarios, en pos del resguardo de nuestra memoria, imagen y cuidado de la institución”, señalaron, según consigna La Tercera.
Ante el descontento de los estudiantes, manifestaron que están realizando las gestiones correspondientes para «eliminar el video en redes sociales, apelando al respeto de nuestra historia».