El periodista Rodrigo Sepúlveda no aguantó el enojo sobre la problemática que se da en los estadios y confesó su malestar en cuanto a estos temas.
Cada mañana del fin de semana, el reconocido periodista deportivo, Rodrigo Sepúlveda, conduce el noticiero matinal de Mega.
Allí, el comunicador toca variados temas que van desde conversaciones con autoridades y políticos, hasta la revisión de divertidas tendencias en las redes sociales.
Sin embargo, esta mañana de sábado, Rodrigo Sepúlveda no aguantó el enojo y expresó su opinión sobre los graves hechos ocurridos el viernes pasado en un partido de fútbol entre Universidad Católica y Flamengo de Brasil.
La molestia del periodista se dio a raíz de la grave situación en que un niño recibió una bengala en su rostro, mientras era espectador del encuentro deportivo por la Copa Libertadores.
«La persona que lanza esa bengala no puede entrar nunca más al estadio… Si las autoridades no logran hacer eso, están perdidos. Estadio seguro agarre sus cosas y se vaya, porque hace mucho tiempo que no funciona«, expresó enfáticamente Rodrigo Sepúlveda.
Posteriormente, Sepúlveda llamó a que la Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) y al equipo Universidad Católica se querellen contra los responsables del terrible hecho sufrido por el menor.
Rodrigo Sepúlveda conoció a su ídolo
Pero no todo son malas noticias, las cuales el periodista deportivo siempre intenta dar a conocer en su programa.
Hace unos días, fue el concierto del reconocido grupo musical Kiss. Sepu es un gran admirador de su música y quería conocerlos si duda.
Uno de los músicos era el que más captaba la atención del comunicador, el bajista Gene Simmons.
Finalmente, tras varias gestiones, Sepu, pudo ir al hotel donde se hospedaba la banda y logró darle la mano al guitarrista.
El anterior no fue el único momento que vivió con Kiss. Cuando estaba en el concierto de la famosa banda, Rodrigo Sepúlveda tuvo la suerte de recoger una uñeta lanzada por uno de los integrantes. Sin duda ese recuerdo lo guardará para toda su vida.