Todo comienza cuando Thomas Frascone, vecino del barrio Indian Beach en Florida, Estados Unidos, increpó a Marcelo Ríos por conducir a exceso de velocidad en diciembre de 2021.
Tras este episodio Frascone obstaculizó el ingreso de Ríos a su domicilio, lo que le valió una advertencia policial por invasión de propiedad.
Pero el problema no quedó ahí. Ya que el vecino del ex tenista aseguró que este aceleraba su auto cada vez que pasaba frente a su casa. Esto era peligroso porque tiene un niño y un perro que siempre están en el patio delantero.
Es por esto que Frascone entregó un video a la policía del Lamborghini a toda velocidad, aunque no sirvió como prueba ya que no se podía ver bien la patente del vehículo. Sin embargo, aprovechó de solicitar más presencia policial en el sector para vigilar el exceso de velocidad de los auto que transitaban.
La funa al Chino Ríos
Semanas después, el 6 de enero de 2022, el vecino del ‘Chino’ escribió una larga publicación en redes sociales. Ahí contaba su situación y recopilaba antecedentes en contra del comportamiento de Ríos.
Entre las acusaciones estaban el hostil comportamiento del ex número 1, quien incluso habría golpeado el auto de Frascone antes de que llegara la policía cuando se instaló fuera de su casa. Además señaló que Ríos hostigaba al vecindario acelerando ruidosamente frente a las residencias de sus vecinos.
Para terminar, recurrió al historial de Ríos señalando que era un ex tenista profesional que fue obligado a retirarse tras varios arrestos y episodios de violencia.
Luego fueron los mismos vecinos quienes llenaron de comentarios su publicación, tratando al chileno de sociópata, enfermo mental y drogadicto.
La demanda contra injurias y calumnias
Por esto es que, el 13 de enero del año pasado, Marcelo Ríos interpuso una acción judicial por injurias y calumnias en contra de Thomas Frascone. El deportista alegó daño irreparable a su reputación y su relación comercial, ya que habría perdido un millonario negocio que le significaría una ganancia de hasta 15 millones de dólares.
El negocio era con la empresa de desarrollo inmobiliario Kapstones Holding, que tenía proyectos en Indian Beach. Pero terminó su contrato con Ríos tras el bullado post y los comentarios de odio de los vecinos del sector.
Por este motivo Ríos solicitó compensación por daños y perjuicios por un monto entre $7.500.000 y $15.000.000, como parte de la acción judicial en contra de Frascone.
Sin embargo, el vecino arremetió contra Ríos demostrando que es figura pública. Esto ya que, según señala La Tercera, en la ley local una figura pública puede alegar difamación demostrando que el acusado, en este caso Frascone, actuó con malicia.
Incluso fueron citados a declarar a dos chilenos, quien fuera el preparador físico de Ríos, Manuel Astorga, y su ex esposa María Eugenia Larraín.
En la instancia, a fines de marzo de 2022, Kenita Larraín aseguró que nunca fue agredida físicamente por el ex tenista. También tuvo que aclarar el episodio que la hizo llegar en silla de ruedas en 2005. “Marcelo nunca me empujó o tiró del vehículo mientras recogía a su hija en Costa Rica. Mis lesiones fueron simplemente causadas por el accidente automovilístico en sí”, señaló.
Además dijo que ella nunca lo ha acusado o denunciado ante las autoridades judiciales o policiales.
No hay acuerdo: este año será el juicio
En mayo del año pasado, Frascone ya había rechazado varios acuerdos económicos propuestos por la defensa de Ríos.
A pesar de que la declaración del chileno sería en enero de este año, una solicitud de Frascone para que fuese grabada en video generó nuevas tensiones entre los vecinos.
Finalmente el juicio fue agendado para este 9 octubre de 2023. Ahí los demandados intentarán demostrar que Marcelo Ríos aún es una figura pública. Por lo que no existen injurias y calumnias por parte de Thomas Frascone, lo que impediría que el ex tenista tuviera una compensación económica.
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