Francisca Merino fue una de las invitadas que tuvo Podemos Hablar la noche de este viernes. Ahí, se refirió a su relación de siete años con Andrea Marocchino.
«¿Y el anillo para cuándo? No le regala anillo», le preguntó Raquel Argandoña en un momento.
«Mira, esta Navidad esperaba el anillo, les juro… No, me regaló otra cosa. Igual me encantó, pero no el anillo», confesó.
«Queremos que se case», agregó Argandoña. Esto fue compartido por Diana Bolocco: «El matrimonio más lento que la reforma de pensiones», dijo entre risas la periodista.
Merino comentó que «él me dice que nunca, nunca, nunca me ha mentido. Él cumple con su palabra».
Luego, explicó por qué todavía no se han casado. «Después de que termine sus temas familiares, de negocios, ahí él dice que va a tener su mente más tranquila. Y, nos vamos a poder casar», detalló.
Diana Bolocco, en tanto, le advirtió que debía tener cuidado porque después «los hombres se achanchan». «No lo voy a dejar, soy enferma de hinchapelotas, así que no creas», aseguró Merino entre risas.
«Me encanta tu espontaneidad. Yo creo que es lo que la gente más celebra», concluyó Bolocco con humor.
La historia de Pancha Merino y su nuevo amor
Francisca Merino conoció a su actual pareja en un difícil momento de su vida. Recordemos que la actriz fue víctima de estafa en 2016, por parte de amigos y socios de Claudio Labbé Castillo, su entonces marido. Esto hizo que se separaran. En ese momento, la actriz también se querelló en contra de Sergio Jalaff Sáenz y Mario Dabed Jamis por estafa y abuso de firma en blanco.
“Volví a tener entusiasmo. Por eso siempre le digo a Andrea: ‘Gracias a Dios llegaste a mi vida’. De verdad, si él no llegaba, para mí y mis niños la vida hubiese sido un infierno. Yo me sentía tan frustrada, tan fracasada. Me habían robado todo el dinero de mi vida, por el que trabajé y junté. Me sentía traicionada, habían destruido a mi familia. De verdad me quería morir”, declaró la presentadora de televisión.
“Si Andrea no hubiese llegado a mi vida con ese positivismo que tiene. Es agradecido de la vida, es contento, es amoroso con todo el mundo. Todo el mundo lo quiere. Él me ayudó y volví a sentirme entusiasmada. Yo volvería a revivir esas vacaciones (donde lo conoció)”, puntualizó Francisca Merino.