Las noticias en torno al pasado de Britney Spears no dejan de salir. Y es que la lucha por acabar la tutela que Jamie Spears ejerce sobre su hija, ha llevado a varios valientes a alzar la voz, incluyendo a su ex marido Jason Alexander.
Todo ocurrió cuando el abogado experto en divorcios, Mark Goldberg, confirmó que fue Lynne Spears, madre de la artista, quien la obligó a anular su matrimonio y pedir el divorcio tras 55 horas de casados.
Y es que Britney Spears y Jason Alexander, amigos de infancia, dieron el sí en 2004 durante un breve viaje a Las Vegas. Pero el matrimonio no prosperó y hoy nos enteramos sobre las verdaderas razones que lo llevaron a su fracaso.
«Fue la madre, Lynne Spears, quien interfiriendo e insertándose en la vida de su hija, vino a Las Vegas, echó a Jason y le consiguió un pasaje de avión a casa», explicó Goldberg al diario Daily Mail.
De hecho, cuando pidió el divorcio, Britney Spears acusó a que «no entendía sus acciones» con Jason Alexander, lo que llevó a que la princesa del pop fuera criticada por su comportamiento.
«Según recuerdo, fue idea de Britney casarse. Dijo que no habían estado bebiendo ni consumiendo drogas, ni menos borrachos», explicó el abogado de Jason Alexander, quien comentó que realmente se amaban.
Pero, ¿qué pasó después de ese momento con Britney Spears y Jason Alexander?
La razón de que el abogado Mark Goldberg compartiera su experiencia, fue para entender que desde temprana edad Britney Spears fue controlada por su familia.
Y el hecho fue muy triste para Jason Alexander, quien amaba a la artista. «Jason estaba confundido, porque amaba a Britney y no quería lastimarla. Pero le tenía mucho miedo a su madre. Él no era un extraño que acababa de conocer. Se conocían desde hacía años. Pensó que si él hacía lo que le pedían, ella vendría, y ambos estarían juntos».
Sobre los sucesos, Jason Alexander confirma la historia. En el podcast «Toxic: The Britney Spears Story» al que fue invitado. Lamentablemente tras el divorcio, la pareja pensó que todo mejoraría.
«Me dijeron que si firmaba el contrato y la anulación, nos dejarían a Britney y a mí continuar con nuestra relación. Y si nos sentíamos de la misma manera en seis meses, nos darían un matrimonio adecuado», comentó el ex esposo de Britney Spears.
La conversación siguió diciendo, «No tenía ninguna razón para creer lo contrario. Pensé que era verdad. De hecho nos permitían que Britney y yo tuviéramos comunicación telefónica».
Según Jason Alexander, ambos siguieron hablando por meses incluso después de firmar el divorcio. Luego, un día él intentó llamar al número de Britney, y su teléfono dejó de funcionar de forma misteriosa.
La historia de amor finalmente terminó de manera abrupta, y dos años después, Britney Spears se casó con el bailarín Kevin Federline, con quien tuvo dos hijos; Sean y Jayden.
¿Qué te parece la historia de Britney Spears y Jason Alexander?
