En el nuevo capítulo de Urbanos, Matías Muñoz, más conocido como Marcianeke, abrió las puertas de su hogar para recibir a María Luisa Godoy, con quien se sinceró sobre su carrera musical y su vida íntima.
Es así como se pudo ver en detalle la casa del músico urbano ubicada en Curacaví, llamando la atención por lo grande que es, y también por otros detalles.
Y es que algo que no pasó desapercibido, y lo que el mismísimo Marcianeke lució durante la entrevista, fueron sus lujos autos, los que mostró tanto por fuera como por dentro.
«Aquí están las naves, no le pidan el auto al mánager», bromeó el artista de 20 años mientras conversaba con la animadora.
«Estas son las reliquias. Esto es un ejemplo de dejarse llevar por las apariencias, porque mira por dentro… está desarmado», comentó Marcianeke sobre sus autos.
Después se dirigió a otro de sus vehículos, el cual tiene algunas magulladuras. «Este también, lo miro como pelela ahora… son marcas de nacimiento», confesó.
El emotivo momento de la entrevista a Marcianeke
Pero mostrar su hogar no fue lo único que hizo el músico, ya que también profundizó sobre otros temas, como su depresión y sus esfuerzos para superar su adicción a las drogas.
En esa línea, Marcianeke no aguantó las lágrimas cuando habló de las críticas que ha recibido, confesando que por estos comentarios comenzó a hacer ejercicio y a cuidar su salud. Todo esto era «para que dejen de criticar, para que vean y se den cuenta con los hechos».
También señaló en el programa que durante años estuvo «refugiándome en droga y ***, creyendo que estaba bien para distraerme, pero no era la forma». Y añadió que «varios me aconsejaron, pero yo no los pescaba. Cuando uno se mete en esas hueás no pesca a nadie, es como enamorarse».
Por último, le aseguró a María Luisa Godoy cómo los comentarios negativos le han afectado. «No sé, uno igual se siente solo (…) Las críticas igual afectan un poco», dijo.
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