Tatiana, hija de Leonardo Farkas, ha iniciado un nuevo proyecto espiritual con el objetivo de conectar y ayudar a sus seguidores.
A través de Instagram, la joven agradeció la confianza que un grupo de personas ha depositado en ella al permitirle entrar en sus vidas. Además, adelantó que próximamente habilitará más cupos para sus lecturas canalizadas psíquicas.
En su página web, Tatiana reveló que desde temprana edad ha tenido experiencias psíquicas y que lleva seis años canalizando a personas.
«Desde pequeña he tenido profundas experiencias psíquicas no intencionadas. Durante los últimos 6 años me he abierto a canalizar a personas con una intención sincera, asegura la hija del filántropo.
En sus historias, invitó a sus seguidores a tener paciencia, ya que actualmente tiene muchas lecturas pendientes.
«A todas las que reservaron una lectura conmigo en mi pagina online y aún no la han recibido, por favor tengan paciencia conmigo. Hoy me tomé mi primer día libre en semanas, he estado sin parar haciendo sesiones en persona para personas que están muy enfermas o realmente luchando situaciones muy heavy» detalló.
«Tendré que subir el precio»
Afortunadamente para sus seguidores, aseguró que pronto habilitará nuevos cupos, ya que actualmente está trabajando de manera presencial.
Sin embargo, debido al aumento de la demanda, está evaluando incrementar los precios de las sesiones, considerando lo que estas conllevan a nivel energético.
«La verdad es que, si voy a seguir haciendo las lecturas en online (no hay ninguna disponible en mi sitio en este momento porque están sold out), tendré que subir el precio, ya que se necesita mucha energía para hacerlas y el precio no coincide con el tiempo que se tarda en dar mi corazón a una lectura», expresó.
«Además, ahora con mi alta demanda en persona de sesiones de curación. requieren la mayoría de mi energía. ¿Es esto algo que todavía te interesa a ti, como mi hermosa comunidad online? Quiero que puedan conectar con lo que hago pero tendría que subir el precio», cerró Tatiana Farkas.
