Como ya te contamos en FMDOS, este sábado 18 de marzo se celebró el esperado matrimonio de Fernando González y Luciana Aymar.
El evento se realizó en el salón Hilaria, ubicado en la comuna de Huechuraba, donde llegaron los 250 invitados.
La ex seleccionada argentina de hockey sobre césped entregó detalles inéditos de la celebración a la revista Hola! “Si bien ya habíamos organizado algo lindo en casa, hubo mucha gente que no pudo viajar para nuestro matrimonio civil y por eso quisimos darnos la oportunidad de hacer algo más grande. Por una cuestión de agendas tuvimos que organizarlo en dos meses”, dijo.
La novia reconoció que los preparativos significaron harto trabajo y que tuvo sus hijos, Lupe (1) y Félix (3), fueron también parte importante del momento. “Estuvimos un poco estresados, pero también tratamos de disfrutar cada momento de ese proceso. Siempre tuvimos claro que el casamiento era una fiesta de nosotros cuatro como familia. Más allá de los papeles, queríamos celebrar todo lo que construimos juntos”, señaló.
El vestido de Luciana Aymar
Sobre su traje de novia, la deportista contó que eligió un modelo hecho en seda y malla en tonos marfil y nude, con aplicaciones bordadas en el top, que era estilo corset. “Quería un vestido boho chic que no desentonara con el espíritu de nuestra fiesta. Si bien me gusta el blanco, me parecía que el principal tono tenía que ser el nude. Me probé varios hasta que vi este que me encantó. Le agregué un tajo que dejara ver una de las piernas y quedé feliz”, afirmó.
El segundo look de Luciana fue más cómodo, con unos pantalones y un top con tirantes, ambos de color blanco.
Banderas chilenas y argentinas: así fue la fiesta
Con la canción Cómo pagarte, del mexicano Carlos Rivera, Luciana Aymar llegó de la mano de su hija Lupe al altar lleno de flores, en donde dio el ‘sí’ con Fernando González, en una ceremonia simbólica dirigida por Benito Baranda.
“Fue hermoso ver tantas caras conocidas llenas de alegría que estuvieron en mi vida y en la de Fer. Enseguida me puse a pensar en todo lo que me costó llegar a esto. Viví momentos muy complicados después de que dejé de jugar, porque todo el amor que siempre había sentido por el hockey de repente se convirtió en un vacío enorme muy difícil de llenar. Hasta que lo conocí a Fer, él me ayudó mucho a sanar y a disfrutar la vida con más sencillez”, explicó la argentina.
Como símbolo de los logros deportivos de la pareja en sus respectivos países, se repartieron banderas argentinas y chilenas. También hubo una mesa de ping pong, karaoke y un show en vivo.
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