Hace algunos meses, Jennifer López y Ben Affleck confirmaron su divorcio tras dos años de casados. La solicitud la pidió ella por «diferencias irreconciliables».
Y es que durante ese tiempo, ambos lucían bastante distantes uno del otro, como si estuvieran en diferente sintonía.
Sin embargo, a pesar de esto, al día de hoy JLo y el actor tomaron una radical decisión, supuestamente por sus hijos: desean ser amigos.
La idea nace porque sus hijos, de matrimonios previos, él con Jennifer Garner, mientras que ella con Marc Anthony, tienen una relación muy cercana. De hecho el pasado 14 de septiembre fueron vistos compartiendo en el Polo Lounge del hotel Beverly Hills.
La información fue revelada por People donde una fuente indicó que la ex pareja seguirá con su divorcio pero en buenos términos.
«Ellos quieren demostrarle a los chicos que las cosas son amigables», dijo esta fuente. «Quieren seguir siendo amigos. Aún hay mucho amor».
El nuevo problema que enfrenta Jennifer López y Ben Affleck
Y ahora salió a la luz un dato para nada agradable que tiene que ver con el hogar que construyeron como marido y mujer.
Según informó TMZ, ocurrió algo con la mansión que compraron y que actualmente está a la venta. Y es que las personas que iban a comprar el recinto por 64 millones de dólares, podrían poner marcha atrás debido a la muerte de un familiar.
Aunque TMZ no ha confirmado esta información, se cree que la venta de la mansión de Jennifer López y Ben Affleck pueda estar en pausa debido a este doloroso momento familiar que enfrentan los compradores.