El próximo 29 de mayo se iniciará el juicio que definirá el destino de los dos chilenos detenidos en Malasia. Mientras continúa la espera, la familia de los jóvenes ha hecho todo lo posible por salvar a sus hijos de ir a la horca.
Las familias de Felipe Osiadacz (27 años, ingeniero comercial) y Fernando Canai (30 años, chef) están destruidas luego de que a mediados del año pasado los jóvenes fueran detenidos por un presunto homicidio que hoy los tiene encarcelados y bajo el riesgo de morir en la horca.
Sus padres han reiterado en diversas ocasiones la inocencia de sus hijos, instando al Gobierno chileno a intensificar las acciones para el rescate y hoy se encuentran a la espera de una audiencia con el presidente Sebastián Piñera.
La declaración
La familia entregó una declaración pública en donde se refiere a todos los sucesos ocurridos, afirmando que el hecho se trata de un incidente con un desenlace fatal y que sus hijos simplemente actuaron en defensa propia frente al malayo que los atacó.
«A partir de ese minuto, este hecho terminó con los sueños y proyectos que ambos tenían, devastando de paso a familiares y amigos, quienes hemos acudido a todas las instancias posibles para traerlos de vuelta a nuestro país», se puede leer en el texto.
Dentro de los planes a futuro que tenían ambos jóvenes, Felipe tenía contemplado estudiar un magister en Barcelona, España, mientras que Fernando esperaba volver a Chile para crear una empresa gastronómica.
La petición
Una de las múltiples acciones que la familia ha realizado para poder volver a ver a sus hijos es la recolección de firmas que llevan a cabo a través de una ambiciosa campaña. La petición online que bajo el lema #CadaDíaVale busca que el Gobierno ayude en la intervención y la reducción de la condena para Fernando Candia y Felipe Osiadac, tiene como meta reunir 30 mil firmas. Hasta el momento lleva 15 mil.
Si quieres firmar la petición lo puedes hacer acá.