Nos guste o no las infidelidades son bastante frecuentes. En promedio, las estadísticas aseguran que el 60% de los hombres han sido infieles, versus un 40% de las mujeres. Hay otros que pensamos que las mujeres son más hábiles y que en este tipo de encuestas, no abunda la honestidad. Según un estudio del Journal of Couple and Relationship Therapy, entre un 45 y un 55% de las mujeres casadas han cometido infidelidad.
¿Y qué es cometer infidelidad?
En términos generales, podemos entender la infidelidad como el no cumplimiento del acuerdo (explícito o no) de exclusividad sexual y/o emocional, estableciendo un vínculo de corto o largo plazo, con un tercero.
¿Y que es eso del micro-cheating? ¿Existe algo como las micro-infidelidades o micro-engaños?
Tal como el nombre sugiere, tienen relación con pequeños comportamientos que implican la interacción con un tercero y que se podrían ver como inofensivos, dependiendo de quien lo mire.
Martin Graff, profesor de psicología en la Universidad de Gales de Sur, Reino Unido, los define como cualquier acto o comportamiento de alguien en una relación que sugiera que hay una tercera persona emocional o físicamente involucrada.
Para el psicólogo Ty Tashiro, son un acto relativamente pequeño de infidelidad emocional con alguien externo a la relación de pareja. Generalmente ocurre a través de aplicaciones, mensajes de texto o interacciones en línea.
Las investigaciones sobre el tema sugieren que las personas emparejadas que se comunican con «jotes», podrían no estar comprometiendo sus relaciones al hacerlo. En el estudio del 2014, publicado en Computers in Human Behavior, no se encontró una disminución en la inversión o el compromiso con la pareja, en personas que flirteaban por fuera. Sin embargo, el autor del estudio afirma que los “micro-engaños” puede ser de doble filo. Lo que puede comenzar como una conversación de texto inofensiva o amistad de oficina puede transformarse en algo más, intencionalmente o no. Si las interacciones externas están empezando a tomar tiempo o energía mental y emocional lejos de tu relación real, eso es una señal de que podrían ser más serias. La advertencia que se desprende de este estudio y que podría ser aplicable a todas las conductas de micro-engaño, es que pueden no disminuir tu propio compromiso, pero sin duda pueden hacer que tu pareja se sienta incómoda o insegura.
Una forma interesante de diferenciar las micro-infidelidades de una infidelidad de tomo y lomo, puede ser definida por el grado en que tus interacciones secretas llegarían a afectar a tu pareja si se enterara.
En este sentido, esto va más allá del comportamiento en sí y tiene relación con el significado que cada persona o pareja le da a estas conductas. En psicología social se dice que lo que es percibido como real, es real en sus consecuencias.
¿Qué piensas tú? ¿Estas conductas son infidelidad? ¿No es parte del mundo privado y de la propia intimidad? ¿Cuando estamos en pareja todo pasa a ser un dominio compartido? ¿Qué harías si descubres a tu pareja haciéndolo? ¿Tú lo has hecho alguna vez?
Si quieres saber más sobre el tema escucha “Cómplices, Los Dos” todos los jueves a las 19:00 horas.
Rodrigo Jarpa es Magíster en Psicología Clínica, Doctor en Sexualidad Humana. Fundador & Docente, Academia de Psicología & Bienestar. Miembro de la American Association of Sexuality Educators, Counselors and Therapists.
Síguelo en su cuenta de Twitter: @rodrigojarpa
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