Mentí. Lo acepto. No existen claves universales que sean garantía absoluta para el 100% de las parejas en el 100% de los contextos. Sin embargo, hay algunas conductas que aumentan significativamente las probabilidades de “sobrevivir” con éxito a la cuarentena en pareja.
Estamos pasando por tiempos tremendamente difíciles y complejos. Tal vez ahora hemos comenzado a valorado la rutina (concepto con muy mala fama). Extrañamos esas pequeñas cosas que hacíamos habitualmente y de manera repetitiva. Sobre todo, aquellas que implicaban el contacto con otros y las que se hacían fuera de casa. Muchas personas se han visto cansadas de estar tanto tiempo con su pareja, lo que les puede llevar a cuestionarse su relación. En base a los mitos del amor romántico se desprende la idea de que lo deseable es compartir la mayor parte del tiempo con nuestra “media naranja” y estar felices de poder hacerlo. ¿Y si esto no ocurre? ¿quiere decir que ya no l@ quiero?
¿Qué dice la ciencia al respecto?
En base a los estudios de Julie Schwartz y su marido John Gottman, quienes han estudiado por años a parejas, analizando rigurosamente sus conversaciones, emociones, conductas y fisiología, estas son algunas de las características de las parejas exitosas (las que logran estar juntas y felices por muchos años):
- Tienen pautas de comportamiento o rutinas consistentes. Esto no quiere decir que cada cierto tiempo no se incluyan las “sorpresas”.
- Son conscientes y se esfuerzan por evitar las críticas o el desprecio cuando se comunican. No hay espacio para insultos y rara vez ponen los ojos en blanco o suspiran como búfalo cuando el otro está hablando. Se enfocan en comunicar asertivamente lo que necesitan y no en lo que les molesta.
- Son conscientes y se enfocan en lo que su pareja hace bien, no en lo que hace mal.
- Dicen la palabra “gracias” cerca de 12 veces al día, incluso por algo tan simple como por la vez número 666 que el otro le prepara el café en la mañana.
- Buscan y potencian la belleza, los rasgos positivos en su pareja y los señalan con cariño y ternura. Generan el “efecto Miguel Ángel”.
- Se abrazan, acarician y dan besos a menudo, con afecto, no solo con erotismo o buscando sexo.
- El profesor de psicología de la Universidad de Washington, Neil S. Jacobson, descubrió en sus estudios durante los años 90, que la mayoría de las parejas que atendió recayeron al poco tiempo, excepto un grupo atípico. Estas parejas mantenían una rutina particular. Todas las noches terminaban el día con una “conversación para reducir el estrés”, en la que cada parte abordaba los puntos más y menos destacados de su día y compartía sus preocupaciones externas. Se escuchaban atentamente sin estar mirando el teléfono. Contrario a la norma, las parejas que escuchaban no trataban de resolver nada. Solo pedían más detalles, en especial sobre las emociones de quien hablaba. Estas parejas sabían cómo mantenerse más felices a largo plazo.
Si quieres saber más sobre el tema escucha “Cómplices, Los Dos” todos los jueves a las 19:00 horas.
Rodrigo Jarpa es Magíster en Psicología Clínica, Doctor en Sexualidad Humana. Fundador & Docente, Academia de Psicología & Bienestar. Miembro de la American Association of Sexuality Educators, Counselors and Therapists.
Síguelo en su cuenta de Twitter: @rodrigojarpa
¡Deja tus preguntas!
[gravityform id=»389″ title=»false» description=»false»]