Sobe todo en tiempos de pandemia, aun cuando ésta parece ir en retroceso, es importante no perder la pasión en la relación de pareja.
¿Cómo reactivarla? ¿Cómo disfrutar más del sexo con tu pareja, esposo/a o amante? ¡Toma nota de estos tips!
Relájate
Esto es un gran desafío en nuestras vidas aceleradas y sobre estimuladas. Estamos tan acostumbrados a vivir con un alto nivel de tensión, que ni siquiera nos damos cuenta de la cantidad de estrés que acarreamos regularmente y, por lo tanto, de cuánto llevamos al dormitorio. Esta tensión -por lo general- disminuye el disfrute sexual.
Como estrategias de corto plazo: respirar conscientemente y estirarnos, nos ayuda a relajarnos y resetearnos. Cualquier actividad física que nos genere al menos unas gotitas de sudor en la frente, puede ser incluida en este punto.
Otras alternativas pueden implicar hacer cambios más profundos en tu estilo de vida. Por ejemplo, practicar yoga o meditación con regularidad. Otras opciones incluyen reducir el tiempo frente a la pantalla y cuidar las relaciones interpersonales.
Es muy recomendable establecer y mantener el contacto con familiares, amistades y otras personas importantes en tu vida. La conexión y el apoyo social potencian la resiliencia. Ayudar a otros que te necesitan también puede ser de beneficio en este sentido.
Ser auténticos y dejar de enfocarse en lo ‘que debería ser normal’
Esto es muy importante para no estar en una constante frustración por no alcanzar «algo» que se supone está bien. Cada pareja debe tener su propio ritmo y lo fundamental es que sea de común acuerdo, consensuado y eso haga feliz a los dos. Para esto es vital saber conocerse bien, ya sea a uno mismo como a la pareja y luego comunicarlo de manera efectiva.
Besa, besa mucho
Los besos reducen nuestros niveles de cortisol (estrés) y aumentan los niveles de oxitocina (conocida como la hormona del amor). Basándonos en los estudios realizados por Helen Fisher, la saliva masculina contiene testosterona y los hombres prefieren los besos húmedos, ya que inconscientemente intentan inocular dicha hormona para provocar el apetito sexual en las mujeres.
Ellas, por su parte, podrían detectar el estado del sistema inmune de su posible pareja y saber «cuánto se cuida».
Conecta con tu cuerpo
Dado que pasamos la mayor parte del tiempo pensando en lugar de sentir y estar presentes en nuestro cuerpo, a medida que pasa el tiempo y la lujuria inicial disminuye, puede volverse un desafío sentir placer durante el sexo. Si estamos pensando, pensando y pensando, es entendible que nos cueste sentir lo que estamos sintiendo.
Dentro de las sugerencias para lograrlo, está el hacer cosas que te inviten a salir de tu cerebro pensante y entrar en tu cuerpo. Los masajes, el baile, el yoga y la meditación son buenas opciones. Básicamente, practicar cualquier cosa que te permita «soltarte» y volver a los sentidos, te ayudará a conectarte con tu cuerpo durante el sexo.
Revisa: 5 sugerencias para seguir disfrutando del sexo en la menopausia
Hazte responsable
No esperes a que tu pareja te complazca o «arregle» tu vida sexual. Tú eres el o la protagonista. En ese sentido, eres tú quien se hace parte del problema para ser parte de la solución. No te autodenomines culpable o víctima, de esa forma el poder está en tus manos pudiendo tomar las acciones que estimes convenientes. Actuar de este modo tiene un costo y este es la responsabilidad.
Ten un diálogo abierto y continuo con tu pareja
La mayoría de las veces, el sexo que se ve en las películas, parece ser intenso, fácil y natural. Tal vez por eso, nos cueste comprender lo esperable y necesario que es hablar de sexo, tal como lo es con otros aspectos de nuestra relación.
Es importante que sepamos como comunicarnos efectivamente; negociando lo que queremos y potenciando lo que deseamos. Para esto puede ser útil el partir por tranquilizar a tu pareja, comentando los aspectos positivos de tu vida sexual: «Me encanta cuando nos reímos juntos en la cama». Luego, podrías sugerir lo que te gustaría: «Hay veces en que me gustaría que lo hiciéramos más lento, que nos diéramos más tiempo…». Es muy recomendable hablar de lo que a uno le gustaría, desearía, etc. como algo con carácter de preferencia; no de obligación.
Mantener el buen sexo en las relaciones a largo plazo requiere de compromiso y esfuerzo. La energía que dedicas a cultivar tu vida sexual te beneficiará de muchas maneras. Las parejas que se sienten más satisfechas con su vida sexual también informan más satisfacción en su relación y con la vida en general. El buen sexo es bueno para ti y para quienes te rodean.