Al no existir las medias naranjas, ni las almas gemelas; en las relaciones de pareja es poco probable que se coincida plenamente en los gustos, las necesidades o en el nivel de deseo que pueda tener cada uno.
Muchas veces se puede ir aprendiendo en el hacer, pero muchas otras lo mejor que se puede hacer es conversarlo.
Lee también: Virus del Papiloma Humano: la importancia de vacunarse
La sexualidad es un área de nuestra vida íntima, rodeada de susceptibilidades, necesidades emocionales y vulnerabilidad. Ya te habrás dado cuenta (espero que así sea) de que no es lo mismo hablar de comida o de mecánica, que hablar de sexo y de lo que a ti te gusta o te molesta; por lo tanto “el cómo” aquí es fundamental.
¿Para qué hacerlo?
El que puedas manifestar explícitamente tus deseos y necesidades repercute directamente en tu satisfacción sexual. Hay estudios que demuestran que las mujeres que hablan abiertamente de sexo con sus parejas, tienen una vida sexual más activa, relaciones sexuales más placenteras y mayor frecuencia de orgasmos. Y es que “el pensé que y el creí que, son amigos del equivoque”.
¿Cómo hacerlo?
Aquí viene lo más importante; ¿Cómo hacerlo? Estas son algunas sugerencias que te podrían servir:
Si te hace sentir incómod@
Si el tema te hace sentir incomod@; te recomiendo aceptar la incomodidad y no luchar contra ella aparentando que no existe. En ese caso junto con la incomodidad que ya sentías, le sumaras la incomodidad de luchar contra ella y aparentar algo que no sientes.
Puede ser útil explicitar la incomodidad y decirle al otro abiertamente como te estas sintiendo.
Dos +, uno –
Por cada dos cosas positivas puedes decir una negativa o petición. Por ejemplo: “me gusta mucho tener sexo contigo y me encanta como me tocas, pero me gustaría que algunas veces nos diéramos más tiempo antes de la penetración”.
Esta “fórmula mágica” se recomienda tenerla presente no sólo al hablar de sexo.
Hablar en primera persona
Habla de tus gustos y necesidades en primera persona. Por ejemplo: “me gustaría que algunas veces nos diéramos más tiempo antes de la penetración” V/S “a todas las mujeres nos gusta el juego previo y lo necesitamos”.
Cuidado
Intenta dejar fuera conceptos como lo normal, lo que todos hacen, lo que tus amigas hacen y sobre todo lo que tus ex parejas hacían.
Buscar el momento
Busca un momento intimo para hablar de esto, donde puedan estar tranquilos, mirándose frente a frente y donde no vayan a ser interrumpidos. Aunque puedan darse las condiciones anteriores; ¡no lo hagas mientras están teniendo sexo!
Si quieres saber más sobre el tema escucha “Cómplices, Los Dos” todos los jueves a las 20:00 horas.
Rodrigo Jarpa es Magíster en Psicología Clínica, Doctor en Sexualidad Humana. Fundador & Docente, Academia de Psicología & Bienestar. Miembro de la American Association of Sexuality Educators, Counselors and Therapists.
Síguelo en su cuenta de Twitter: @rodrigojarpa
¡Deja tus preguntas!
[gravityform id=»389″ title=»false» description=»false»]