Todos nos parecemos y todos somos distintos. El ámbito de nuestra sexualidad —el cómo la vivimos, con qué disfrutamos, cuáles son nuestros deseos y fantasías— también se caracteriza por un sin fin de singularidades. Nuestra sexualidad puede o no, manifestarse dentro de otras cosas, a través de las prácticas sexuales.
Estos son comportamientos que se realizan con el objetivo o intención, de dar y/o recibir placer sexual. El conocer nuevas prácticas —más allá la de la típica posición del misionero— nos permite conocer más diversidad, y tal vez atrevernos a experimentar y aumentar el repertorio. Esto último, puede servir como un potente estímulo al deseo. Puede que haya algunas prácticas de las que nunca has escuchado, otras que no hayas experimentado y te gustaría probar, y otras que ni muert@ llegarías a hacer.
Aquí hay 5 prácticas sexuales relativamente frecuentes, pero todavía no convencionales:
1. Humming
Consiste en emitir una vibración sobre cualquier parte del cuerpo o en los genitales, principalmente durante la práctica del sexo oral. Una sugerencia es pronunciar algo parecido a «Ommm» y así generar una vibración mediante las cuerdas vocales.
2. Sploshing
En esta práctica se usan alimentos, bebidas o sustancias líquidas que se esparcen en el cuerpo, pudiendo ingerir o no los alimentos. Se recomienda usar frutas, helado o chocolate. También venden productos especiales en las tiendas de juguetes para adultos, que se pueden usar también para hacer masajes y son comestibles.
3. Bluetoothing
Consiste en la utilización de juguetes sexuales vibratorios, que puedan ser activados a distancia. En general se utilizan vibradores que puedan alojarse en la cavidad vaginal y que puedan ser activados por la pareja.
4. Quickie
También le se conoce como «rapidín» o un «rapidito» en español. Esta práctica muy atingente a los tiempos actuales, se relaciona con tener sexo en no más de 15 segundos. Hay que aclarar que esos escasos segundos se refieren a la duración del coito o penetración. Siempre es necesario algún grado de estimulación previa.
5. Fisting
Esta práctica consiste en la introducción parcial o total del puño (fist) en el ano o vagina. Es considerada una práctica sexual extrema, aunque los experimentados refieren que es altamente excitante y placentera. Es fundamental tener ciertas precauciones, como medidas higiénicas, uso de lubricante y técnicas de dilatación progresiva. Se recomienda también ser cuidadoso en los movimientos, ya que se pueden generar lesiones, desgarros y/o hemorragias. En algunos casos llega a ser necesaria la intervención quirúrgica.
Existen muchas otras prácticas sexuales poco convencionales. Aquí te dejo algunos nombres por si te interesa investigarlas: yiff, florentino, king out, bondage , footjob, sexting, slow sex, karezza, etc.
Recuerda que en el programa de esta semana seguiremos conversando sobre este tema. Escúchanos este jueves en «Cómplices, Los Dos», de 20:00 a 21:00 horas. ¡Puedes comentar con nosotros usando el hashtag #ComplicesFMDOS!
Rodrigo Jarpa es Magíster en Psicología Clínica, Doctor en Sexualidad Humana. Fundador & Docente, Academia de Psicología & Bienestar. Miembro de la American Association of Sexuality Educators, Counselors and Therapists.
Síguelo en su cuenta de Twitter: @rodrigojarpa
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