¿Sabías que nuestros órganos sexuales más grandes son la piel y el cerebro? En relación con este último, su complejidad y la gran cantidad de funciones que cumple son sorprendentes.
Esta maravilla evolutiva, de aproximadamente un kilo y medio de peso y más de 100.000 millones de neuronas, juega un papel clave en nuestros deseos y respuestas sexuales.
Por lo tanto, es entendible que varios problemas de salud mental pueden afectar nuestra libido o deseo sexual. Estos son algunos de ellos:
Depresión
Uno de los síntomas característicos de la depresión es la pérdida de interés y de experimentar placer en las cosas que antes se disfrutaban. Dentro de estas, una de las actividades que comúnmente se ve afectada es el sexo.
La fatiga, la apatía y la baja autoestima que generalmente acompañan a la depresión pueden afectar fundamentalmente la libido y la capacidad de experimentar placer.
Ansiedad
Es difícil entrar en “modo sexo” cuando estamos en “modo ansiedad”. De hecho, estos dos “modos” son bastante incompatibles. Si estamos en estado de alerta, con nuestro cuerpo tenso y nuestra mente nublada en historias de futuros amenazantes, literalmente no hay espacio para nada más.
Los sentimientos de ansiedad pueden aumentar la producción de cortisol en el cuerpo, también conocida como la hormona del estrés. El cortisol puede llegar a suprimir o disminuir las hormonas sexuales vinculadas al deseo.
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TOC
Puede ser difícil disfrutar sexualmente así como sentir interés por hacerlo, si nos “invaden” de manera constante pensamientos, impulsos o imágenes mentales indeseables. Estas son las características generales del Trastorno Obsesivo Compulsivo o TOC.
Por otro lado, el TOC también puede presentarse con una libido alta debido a la hiperfijación en el sexo y los encuentros sexuales. Por ejemplo, se puede tener el pensamiento recurrente de que si no tengo sexo un determinado número de veces al día o la semana, algo malo puede pasar. Luego, para evitarlo, se tiene sexo de manera compulsiva, pero no necesariamente placentera.
Trastorno bipolar
El trastorno bipolar es un trastorno del estado de ánimo que puede provocar cambios de ánimo intensos. Hay veces en que se experimentan períodos de mucha energía, ánimo y euforia (manía) y otras veces sentir profunda tristeza, desesperanza y depresión. En ocasiones se pueden presentar síntomas maníacos y depresivos a la vez; lo que es conocido como episodio mixto.
Durante un episodio maníaco, se puede experimentar hipersexualidad y/o un aumento de parejas sexuales. Durante un episodio depresivo, se puede experimentar hiposexualidad o una disminución muy marcada del deseo sexual.
Si bien hay varios problemas de salud mental que podrían afectar el deseo sexual, es importante informarse, buscar apoyo en otras personas, como por ejemplo tu pareja o una amistad cercana y eventualmente ayuda profesional. Como siempre te decimos en Cómplices Los Dos, todo tiene solución.