El caso de María Ercira Contreras Mella, mujer desaparecida en medio de la celebración del Día de la Madre tras ir al baño del restaurante Fundo Las Tórtolas, tuvo un nuevo drástico vuelco.
Según la información entregada por La Tercera y extraída de la carpeta investigativa en cuestión, se puede ver una conversación entre Carla Hernández (nieta de la adulta mayor desaparecida en Limache) y su marido, donde hablaban supuestamente con un trabajador del mencionado fundo.
De hecho, es ese mismo chat el que ahora se filtró en ADN.CL, y que da cuenta de llamativos dichos, donde un sujeto asegura que, desde la administración del restaurante en Limache, les pidieron eliminar las imágenes de algunas de las cámaras.
Hay que destacar que la investigación fue declarada como secreta el 12 de septiembre y recién el 30 de noviembre fue levantada.
Nuevo vuelco en el caso de María Ercira: estos eran los mensajes del supuesto trabajador
Según el mismo medio, Carla explicó que “yo hace un tiempo recibí unos mensajes de una persona que supuestamente era trabajador del fundo y tenía miedo de hablar”.
“De hecho, me dijo que tanto él como su familia estaban amenazados con sicarios. Y que nosotros también. No me mandó ninguna prueba de ser trabajador, pero sabía muchas cosas. Todo muy extraño”, añadió.
Todos estos mensajes fueron compartidos por el sitio La Cuarta. En estos escritos, se pueden leer frases como:
“No confío en nadie, estamos amenazados de muerte y tú también con tu familia. (Nombre de administradora) contrató dos sicarios venezolanos para que a ustedes los mantengan alejados”, fue uno de los inquietantes textos que escribieron.
Otros decían: “Me pidieron deshacerme de las imágenes de cámaras de (día) 12″, “El riesgo para nosotros es delicado. Mi señora me ayudó a contarte esto, pero después de todo lo que ha pasado pude recién atreverme a hablarte” y “Esto será lo último que te diré, pero yo quise hablar el mismo día, pero no pude porque los dueños nos llamaron a todos a las nueve de la noche y me pidieron que saque las grabaciones sin saber que era. Y ahí supe que era de la señora. Después me dijo que si hablaba no sería bueno para mí y mi familia, y desde ese día que vivimos en angustia por todo, y cuando la PDI llega al restaurante también preguntan si alguien se ha salido de lo pactado”.
Por su parte, Carla Hernández, nieta de María Ercira, ha aclarado en distintos medios de comunicación que se siente muy triste por cómo han sucedido las cosas con Fiscalía en la investigación de su abuela.