Un desgarrador caso en España ha acaparado la atención en el mundo entero. Dos niñas desaparecidas cuya historia mantiene en vilo a millones de personas.
Y es que Olivia y Anna desaparecieron el pasado 27 de abril en Tenerife. Olivia de 6 años y Anna de apenas un año, fueron secuestradas por su padre Tomás Gimeno. El hombre de 37 años las recogió para la visita parental acordada on su ex pareja. Pero no se las devolvió a la hora pactada con Beatriz Zimmermann, la madre de las dos pequeñas.
El desgarrador caso parte con la desaparición y la inquietante advertencia de Gimeno a la madre de las niñas. «No volverás a saber de nosotros», le dijo en una llamada telefónica la noche de la desaparición.
El cuerpo de Olivia
Aunque las noticias ya eran estremecedoras, este jueves 10 se informó del hallazgo del cuerpo de una menor en la zona de búsqueda.
Si bien la delegación del gobierno en Canarias no confirmó la identidad inicialmente, fuentes cercanas a la investigación afirman que se trata de la mayor de las hermanas. Luego se supo que, mediante huellas dactilares, las autoridades comprobaron la identidad de Olivia.
El hallazgo del cuerpo se realizó, en el fondo del mar, junto al ancla de la embarcación del progenitor. Esta última, que había aparecido a la deriva y sin ancla, al día siguiente de la desaparición.
La noticia se le comunicó a la madre de las niñas, al igual que a la familia paterna, poco después del hallazgo.
Por su parte, los trabajos de rastreo de la Guardia Civil continúan en el lugar.
Revisa: Horrible: Menor de 12 años hospitalizada después que su tío la violó en Osorno
Así ocurrieron los hechos
Según informan los medios locales, Tomás Gimeno nunca aceptó la separación de Beatriz Zimmermann y menos que su nueva pareja pasara tiempo con las niñas.
El día de la desaparición, el padre recogió a sus hijas a las 17.00 horas para pasar la tarde con ellas y quedó con la madre en llevarlas de vuelta a las 21.00 horas.
Estuvo con las niñas en casa de sus padres hasta las 19.30 horas, cuando regresó a su domicilio, donde permaneció solo con las niñas cerca de dos horas.
A las 21.30 horas, las cámaras del puerto de Santa Cruz de Tenerife captaron a Tomás Gimeno solo, sin Olivia y Anna, llevando dos petates militares y bultos desde su auto, hasta la embarcación de recreo de su propiedad.
Ya había amenazado por teléfono a Beatriz Zimmermann, madre de las niñas desaparecidas, y le había advertido que no volvería a ver a sus hijas.
A las 21.50 horas hizo un primer viaje a alta mar. Ella lo llamó insistentemente, pero él no contestó y luego quedó sin batería.
Gimeno regresó a tierra a las 23.30 horas y fue a una gasolinera a comprar un cargador para su móvil. Después, solicitó al vigilante de seguridad del puerto cargar su teléfono.
Último contacto
Fue entonces cuando hizo la última llamada a su ex mujer. La tranquilizó y la hizo creer que había acostado a las niñas y que al día siguiente las llevaría de vuelta, lo que alivió a Beatriz Zimmermann.
Sin embargo, Tomás Gimeno volvió a adentrarse en el mar y desde ahí se perdió su pista. Durante la madrugada, envió mensajes en clave de despedida a su familia y amigos que, alarmados, avisaron a la madre de las niñas a primera hora del 28 de abril.
A las 08.00 horas, ésta interpuso la denuncia por las niñas desaparecidas ante la Guardia Civil.
Cabe destacar que este caso ejemplifica una forma de violencia machista extrema y todavía poco conocida, que es la violencia vicaria. Una que consiste en causar un daño irreparable a la madre a través de los hijos.
Podían estar en Chile
Una de las teorías indicaba que ambas hermanas podrían tener como destino Chile. Su padre, en reiteradas ocasiones había expresado su intención de vivir en el país. Si bien también se especuló que Argentina y Uruguay, eran otros países que también le gustaban, Chile era la opción principal.
“Chile le encantaba. Y hemos sido nosotros los que hemos ampliado a Uruguay y Argentina por esa afinidad en cuanto a sociedad que hay entre los países”, dijo el presidente de SOS Desaparecidos, Joaquín Amills.
Si eres testigo o víctima de violencia contra la mujer, llama a cualquiera de los siguientes números:
- Fono Familia de Carabineros: 149
- Policía de Investigaciones: 134
- Fono de orientación y ayuda por violencia contra las mujeres: 1455
- Fono Denuncia Segura: 600 400 0101
- WhatsApp Mujer +569 9700 7000
